Nachá. La parroquial de este núcleo de población situado en lo alto de una montaña caliza está dedicada a San Nicolás y se ubica en la parte más elevada del pueblo. Es de origen románico levantada en torno al siglo XII. Ha sufrido numerosas modificaciones posteriores, como la torre octogonal de ladrillo, que ha sido tomada como modelo para el dibujo, que se levantó sobre la cabecera en el siglo XVIII.
Está orientada al norte, para salvar los problemas que planteaba la topografía del terreno. Ello obligó de igual modo a la construcción de una cripta de aparejo diferente al del ábside. La primitiva portada, situada a mediodía, a una altura notable sobre el actual pavimento de la calle fue recuperada recientemente y presenta capiteles labrados con figuras sobre los que aparece una cenefa vegetal bien conservada.
